Alberto González Amador se dio este lunes un golpe en la cabeza al chocar accidentalmente con un cámara de televisión. Los hechos están recogidos en vídeo y fueron vistos por más de una decena de periodistas, entre ellos de EL PAÍS, que lo esperaban esta mañana a las puertas de los juzgados de Plaza de Castilla, donde compareció ante la jueza como investigado por fraude fiscal. No queda duda de que la pareja de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, y el profesional de la información chocaron fortuitamente. El cámara de televisión caminaba hacia atrás para no dejar de enfocar a Amador, se topó con un poste callejero y se paró en seco. Sucedió tan rápido que el empresario no pudo reaccionar y se pegó con la cámara. Luego, continuó andando con la mano en la frente, en busca de un taxi. Poco después, Ayuso calificó los hechos de “agresión” y acusó a la delegación del Gobierno de no haber desplegado policías. Este órgano responde que no había ninguna protesta y que los abogados del empresario tampoco habían pedido seguridad. Los letrados han aprovechado el ruido generado por la presidenta. Han solicitado al decanato de los juzgados que refuerce la protección en futuras citas judiciales, según fuentes de la Comunidad de Madrid.
