El Mediterráneo, ese mar que hoy une culturas y continentes, no siempre estuvo lleno de agua como lo conocemos ahora. Hace unos seis millones de años, se quedó prácticamente seco debido a un fenómeno extraordinario: el cierre del Estrecho de Gibraltar.
Este suceso, provocado por movimientos tectónicos, aisló al Mediterráneo del Atlántico durante unos 10.000 años, lo que cambió el clima y los ecosistemas de Europa de manera radical.
Con el paso del tiempo, la evaporación del agua hizo que el nivel descendiera drásticamente, transformando la cuenca en un vasto desierto salino.
Solo quedaron pequeños restos de agua que sobrevivieron gracias a ríos como el Eosahabi. Imagina una región árida donde ahora hay costas llenas de vida, un cambio que impactó tanto a la fauna marina como a los ecosistemas terrestres, obligándolos a adaptarse a condiciones extremas.
El canal de YouTube EduCaixaTV ha publicado un interesante vídeo-mapa que detalla cómo ocurrió este fenómeno, desde el cierre del estrecho hasta la recuperación del mar.
Este vídeo explica cómo la barrera que aisló al Mediterráneo se degradó con el tiempo, permitiendo que las aguas del Atlántico regresaran para darle su forma actual. Fue un proceso tan impactante que llegó a unir Europa y África en un único supercontinente, alterando los patrones climáticos de la región.
Ahora bien, surge la pregunta: ¿podría volver a secarse el Mediterráneo? Aunque repetir exactamente el mismo fenómeno parece poco probable, el Mediterráneo es un mar vulnerable.
Su elevada tasa de evaporación y su carácter semicerrado lo hacen especialmente sensible a los cambios climáticos y ambientales. Esto no significa que vaya a desaparecer mañana, pero sí que es un ecosistema que requiere atención.
Este tipo de eventos históricos nos recuerdan lo dinámica y frágil que es la naturaleza. El Mediterráneo, tan importante para la humanidad, ha cambiado dramáticamente en el pasado, y aunque su futuro parece más seguro, no está completamente exento de riesgos. Por eso, entender su historia es clave para protegerlo.