La Policía Nacional detuvo a principios de noviembre a tres policías locales de Santa Susanna (Barcelona) y a la concejal del PP del municipio, Inmaculada Casilla, sospechosos de formar parte de un entramado dedicado a la regularización de extranjeros. La policía acusa a los cuatro implicados de simular contratos para una organización criminal que presuntamente tramitó de manera fraudulenta permisos de residencia para una cuarentena de personas, según fuentes del caso. Los investigados supuestamente fingieron emplear como trabajadores del hogar a diversas personas a cambio de dinero para que el grupo pudiese legalizar su situación en España. La detención de los cuatro acusados quedó sin efecto después de comparecer ante la policía, y permanecen como investigados por los delitos de falsedad documental, organización criminal y un delito contra los derechos de las personas extranjeras.