Un empresario de la República Democrática del Congo, dedicado al comercio de diamantes y con empresas de logística, fue detenido hace menos de una semana cuando recibía un alijo de 197 kilos de cocaína en el aparcamiento subterráneo de un centro comercial de Madrid. La Policía Nacional truncó la entrega de esta partida, valorada en unos 6 millones de euros, según estimaciones policiales, y arrestó a tres personas. Además del empresario congoleño, fueron detenidos un compatriota que le acompañaba y un ciudadano colombiano. Todos ellos han ingresado en prisión provisional por orden del juez. Esta es la primera vez que agentes de la Unidad de Droga y Crimen Organizado (Udyco) detectan la presencia de clanes de la droga de origen centroafricano en España, según detallan a EL PAÍS fuentes de este grupo policial. El empresario detenido viajó desde Dubái, la ciudad-emirato del golfo Pérsico que se ha convertido en los últimos años en un santuario para grandes capos de la droga, pero también para blanqueadores de capitales, ciberdelincuentes y fugitivos de todo tipo.