El 1 de diciembre los usuarios de las Instituciones de Salud Previsional (Isapres), las instituciones de la salud privada en Chile, comenzaron a recibir las notificaciones de parte de las entidades a las que están afiliados en donde se informaba sobre la devolución que le correspondía a partir de la aplicación de la ley corta de isapres, la normativa que rescató al sistema para evitar la quiebra frente al cumplimiento de un fallo de la Corte Suprema que obligó a las aseguradoras a devolver a sus clientes cerca de 1.200 millones de dólares cobrados en exceso. Muchos cotizantes se llevaron la gran sorpresa de que el pago que les correspondía se realizaría en hasta 13 años, con montos que en algunos casos llegaron a menos de un dólar por mes.