Alemania despertó este lunes casi aislada por aire debido a una huelga de 24 horas convocada en 13 de los principales aeropuertos del país, incluidos los de Fráncfort, Múnich y Berlín. El paro ha obligado a cancelar 3.400 vuelos, afectando a aproximadamente 510.000 pasajeros, según una primera estimación de la Asociación de Aeropuertos (ADV).
